La audiencia del panista Ricardo Anaya nuevamente fue pospuesta.

El juez de control del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, Marco Antonio Fuerte Tapia, la aplazó para el próximo 31 de enero a las 09:00 horas luego de que el abogado del ex dirigente blanquiazul, Eduardo Aguilar, pidiera más tiempo para leer las 137 mil hojas de la carpeta de investigación, a lo que las partes involucradas no se opusieron.

El juez insistió en que la siguiente audiencia para la imputación contra Anaya Cortés por supuestamente recibir un soborno de 6.8 millones de pesos para votar a favor de la reforma energética de Enrique Peña Nieto deberá ser de manera presencial.

E incluso advirtió que de no presentarse en la sala de audiencias, le dejará a la FGR la posibilidad de que recurra a otro mecanismo legal para conducirlo a proceso.

Quien acusó al queretano fue el ex director de Pemex, Emilio Lozoya, quien recientemente fue recluido por no aportar pruebas de sus dichos y estar aplazando su contribución a la justicia.

Anaya ha evidenciado las inconsistencias en los dichos de Lozoya Austin, con lo cual podría revertir las acusaciones en su contra.

Sin embargo, esto tiene un tufo de querer apresar al panista obligándolo a que se presente físicamente y amenazándolo con que, si no lo hace, pueden girar una orden de aprehensión en su contra.

Ni siquiera han reunido las pruebas y todo se remite a un señalamiento que hizo un hombre que no ha aportado elementos suficientes para concretar sus dichos.

Cero y van dos: vuelven a posponer audiencia de Ricardo Anaya