En la actualidad sólo cinco países de América Latina permiten el aborto sin penas de cárcel. De acuerdo al Centro de Derechos Reproductivos 90 millones (5%) de mujeres en edad reproductiva viven en países que prohíben por completo el aborto.

Los países que prohíben el aborto, incluso cuando la vida de las mujeres está en riego en América Latina son: Jamaica, Haití, Surinam, Honduras, Nicaragua, República Dominicana y El Salvador. Se estima que 97% de las mujeres latinoamericanas en edad fértil viven en estos países, según datos del Centro.

Mientras tanto, en 14 países de la región está permitido bajo algunas causales sujetas a legislaciones federales o estatales. Como cuando la vida de la mujer corre peligro por motivos socioeconómicos, en casos de violación, de incesto o cuando el producto presenta malformaciones.

De estas naciones destaca: Costa Rica, Colombia, Venezuela, Belice, Guatemala, Paraguay, Brasil, Ecuador, Bolivia, Perú, Trinidad y Tobago, Chile, Paraguay y Panamá.

En Brasil tiene tres causales en los que se permite el aborto: cuando la vida de la mujer corre peligro, en casos de violación y en casos de malformaciones.

Los países que tienen legalizado el aborto son: Cuba, Puerto Rico, Uruguay, Argentina, Guyana, Guyana francesa, y también en las islas francesas de Martinica, Guadalupe, islas vírgenes estadounidenses y Barbados. El límite gestacional más común en la región es de 12 semanas.

Por alteración fetal o malformaciones: Belice, México, Panamá, Colombia y Chile.

Por violación: Brasil, Chile, Panamá, México, Colombia, Ecuador y Bolivia.

Autorización de los padres: Uruguay, Cuba y Panamá.

En Paraguay, Trinidad y Tobago, Venezuela, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia y Costa Rica el aborto sólo está permitido cuando existe riesgo de vida o de salud para la persona gestante.

En México Panamá, Colombia, Ecuador, Brasil y Chile. Colombia y Bolivia consideran las causales para permitirlo en casos de incesto o para preservar explícitamente la salud mental.