Estamos parametrizados, somos producto de otro humano que eligió sin preguntarnos ponernos un nombre, claro no podíamos elegir en ese entonces, apenas podíamos agarrar la teta de la mamá, así que, si de casualidad nos pusieron Eluterio, Pantaleona, o Laura Bozo esa será nuestra cruz los años restantes de vida y llamarte Laura Bozo es lo peor…


Las creencias habilitadoras que nos construyen como individuos lo llevamos siempre, la bendita idiosincrasia nos marca a todos
Somos una amalgama dentro de grupos de referencia, pertenencia, familia, escuela, iglesia, cultura y medios de comunicación, ahh pero esto enojó mucho a las nuevas generaciones.

Lo bueno es que hoy ya estamos llegando a la cúspide de la evolución, según los medios de comunicación globales hoy reinventamos la idiosincrasia al capricho de lo que me plazca, las normas de la inclusión, incluyen la libertad para elegir, lo que sea, si lo que sea, a la edad que sea y hoy ya normalizamos que un bebe de 3 y 5 años decida su género, su sexo también.

Hoy un hombre de 43 años puede asumirse como niña de 8 y reclamarle al mundo que lo reconozcan así y señalar a quien no lo reconozca de retrógrado incivilizado.

Busca el video en YouTube, bueno incluso hay seres humanos que se reconocen como perras, ladran y andan en la calle con cadenas y de igual manera quien no los reconozcan serán tachados de incivilizados retrógrados, y otra vez busca el video en YouTube. 

La normalidad es un constructo social dentro de un sistema que en conjunto con valores desarrolla una cultura hoy la podemos llamar la Neo-Idiosincrasia

Estamos en la nueva edad media, donde solo hace falta que nos señalen con el dedo por no ser incluyentes sino hablas el verbo incluyente como; Todes, Elles, Amigues, serás crucificado en internet, 

Las escuelas lo entendieron, esas instituciones responsables de formar a un ciudadano para que encaje en la sociedad, no cuestionaron, no pusieron oposición, aceptaron estos cambios de ideología de internet y su mejor idea es poner baños en las escuelas para los niñes, claramente vale más el cheque que pagan los papás de esos niños y evitar el escándalo de ser una escuela insensible, sin moral y poco Cool.

La evolución no siempre es un avance, la crítica, la reflexión, la profundidad del pensamiento ya no es para esta época, hoy tenemos cantantes que hacen millonarios de la noche a la mañana a pseudo artistas, recitadores con auto tune que al son de martillazo en el culo llenan estadios.

Así como esas rimas espontáneas que viven y mueren rápidamente es el reflejo de los valores que hoy se están formando, efímeros, sin profundidad, pero con un potencial mediático que ya hubiera querido Calígula para invitarte en redes sociales a una de sus fiestas, hoy seguramente sería influencer.

Mario Spindola

Inspirado por 

El libro de Umberto Eco

De la estupidez a la locura