La Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) alertó sobre la expansión de cárteles mexicanos a cuatro continentes. En el reporte “Drogas sintéticas y nuevas sustancias psicoactivas en América Latina y el Caribe 2021”, reportó la intensificación de actividades de grupos criminales mexicanos para suministrar metanfetaminas en América, Asia, Europa y Oceanía.

En América

Según registros de la agencia de Administración de Control de Drogas​ (DEA) de Estados Unidos, los cárteles con mayor presencia en ese país son el de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG). El primero distribuye metanfetamina al por mayor en centros de distribución ubicados en diferentes ciudades, además de traficar fentanilo. El segundo, el CJNG, mueve las mismas drogas entre ciudades que conectan a México con Estados Unidos, como Tijuana, Juárez y Nuevo Laredo.

En Estados Unidos, las incautaciones de metanfetamina se triplicaron entre 2013 y 2018. En 2019, las cantidades confiscadas duplicaron las de 2017, alcanzando 120 toneladas.

En cuanto a Canadá, el reporte apunta que hay una ola de consumo de metanfetamina, y hay indicios de que al menos una parte importante proviene de México. En febrero de 2019, se incautaron 180 kilogramos de esta droga en Ontario, que venía oculta en llantas de repuesto enviadas en un cargamento de automóviles desde México.

En Europa

La Europol ha detectado actividades de cárteles mexicanos en Europa, como el de Sinaloa, el de Tijuana y el CJNG. En marzo de 2020, la Guardia Civil Española desmanteló una organización en Alicante, Valencia, mientras intentaba introducir al país 275 kilogramos de metanfetamina procedentes de México, ocultos en bloques de mármol. Adicionalmente, hay numerosas personas de origen mexicano detenidas en Europa, especialmente en Bélgica y Países Bajos, por estar vinculadas a la fabricación de metanfetamina de cristal.

En Oceanía

Australia y Nueva Zelanda han informado de tráfico de metanfetamina a gran escala vinculado con México en los últimos años, además de importantes incautaciones. En 2019, la Policía Nacional Australiana y la Fuerza Fronteriza Australiana detuvieron a un ciudadano mexicano que intentaba introducir al país 755 kilogramos de metanfetamina de cristal oculta en pieles de vaca.

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En Asia

Las actividades delictivas de cárteles mexicanos se han identificado principalmente en Japón. En enero de 2018, se decomisaron en el puerto de Tokio alrededor de 250 kilogramos de metanfetamina ocultos en dispositivos de corte láser provenientes de México. En 2017, se confiscaron en el puerto de Yokohama casi 230 kilogramos de metanfetamina ocultos en tubos de acero en un cargamento que llegó desde México.

¿Qué implicaciones tiene para México?

La expansión de los grupos criminales mexicanos hacia prácticamente todos los continentes es una muestra más de cuán equivocada es la idea de López Obrador de que “la mejor política exterior es la interior”. La incapacidad institucional de México para garantizar el imperio de la ley afecta a otros países. Hasta hace poco, el principal interesado fuera de México en controlar a los cárteles mexicanos era Estados Unidos, lo cual, de por sí, representaba ya un gran peso y un reto para el gobierno de AMLO. Ahora, otros gobiernos están encendiendo sus alarmas y podrían presionar a México, de manera conjunta o individual, para que desarrolle las capacidades necesarias para resolver el problema.

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