Para los pueblos originarios la defensa de la tierra ha sido legendaria y ha tenido un sentido más colectivo que el que le da la población mestiza a la hora de luchar por ella.
Por un lado, perciben un acercamiento con las autoridades para visibilizar a sus comunidades; por otro, advierten que continúan los despojos y las imposiciones en su contra. No todo está mal, pero aún hay mucho por mejorar.