1. La minuta: ese héroe silencioso del marketing digital
Si los equipos de marketing tuvieran un Olimpo, la minuta sería ese dios discreto que no presume, pero sin el cual todo colapsa. Una minuta es básicamente el registro de acuerdos, tareas y compromisos después de una reunión. Sí, lo que a veces todos “dan por entendido”, pero que al día siguiente nadie recuerda.
Ejemplo: “Yo pensé que tú ibas a mandar el brief”. “No, yo pensé que tú ibas a mandar el brief”. Si hubiera minuta… no habría drama.
2. ¿Por qué deberías amar (o al menos tolerar) las minutas?
Porque te salvan de malentendidos épicos dignos de telenovela. En marketing digital, donde los deadlines son tan reales como las tendencias que desaparecen en 24 horas, una minuta clarifica quién hace qué y para cuándo.
Ejemplo: “Entrega jueves 12:00 PM — Juan diseña, Fer aprueba, Dani publica”. Nadie puede decir que no vio el mensaje; ahí está, en la minuta… como testigo implacable.
3. Las minutas evitan el famoso ‘teléfono descompuesto’
Todos conocemos este fenómeno: lo que se discutió en la junta inicia como “hagamos un video” y termina en “alguien está grabando un documental”. Una minuta detiene esa mutación inesperada.
Ejemplo: Reunión: “Queremos un TikTok de 10 segundos”. Sin minuta: alguien produce una miniserie en 4 capítulos. Con minuta: un TikTok de 10 segundos. Fin.
4. Le dan estructura al caos creativo
El marketing digital vive entre ideas brillantes, cambios de último minuto y un calendario que parece Tetris. La minuta aterriza lo creativo en acciones concretas. Es como el Google Maps del equipo: te dice hacia dónde vas, quién maneja y qué evitar.
Ejemplo: “Pendiente creativo: explorar 3 conceptos visuales para campaña – responsable: Ana – fecha: viernes”. Clarito, directo, civilizado.
5. Una prueba escrita vale más que mil ‘yo sí te dije’
Al final del día, dejar acuerdos por escrito es una forma elegante de proteger el trabajo, aclarar expectativas y mantener el buen mood del equipo. No es desconfianza, es profesionalismo (y salud mental).
Ejemplo: “Como se indicó en la minuta del 17 de noviembre…” y listo, caso resuelto sin discusiones interminables.
¿Y tú, qué opinas?
Karina González






