Ayer comenzamos a explorar el interés (o desinterés) de los jóvenes en la política. Apuntábamos que su participación electoral es escasa. En las elecciones de 2018, las personas entre 20 y 29 años fueron el grupo que menos votó, con 52.8% de participación (sólo después del grupo de personas de 85 años o más). La cifra contraste con el promedio nacional, que fue de 63.2%, el cual considera todos los grupos de edad.
Pero la participación política no se reduce al voto. Hay otras formas de participar en política conocidas como “no electorales”. Entre estas actividades está ser militante de un partido o reunirse con autoridades, y también hay formas más sencillas, como asistir a una manifestación, firmar una petición o incluso informarse sobre temas políticos.
¿Los jóvenes tienen interés en la política? I
En una publicación de 2015, el Instituto Nacional Electoral (INE) destacó que en general la población mexicana no se involucra mucho en este tipo de actividades y que los jóvenes, son, de nuevo, el grupo que menos participa en actividades políticas “no electorales” (personas entre 18 y 29 años). En cambio, las personas más propensas a participar en estas actividades son los mayores de 50 años.
Hay otros factores que inciden para que los mexicanos y las mexicanas participen en política no electoral. En general, son más propensos a involucrarse quienes tienen al menos educación secundaria terminada y, en el caso de huelgas, bloqueos y manifestaciones, quienes cuentan con educación universitaria. Los hombres suelen participar más en actividades políticas no electorales porque, en promedio, sus niveles de escolaridad son mayores.
El factor que hace a las personas más propensas a participar en actividades políticas no electorales es la membresía a una organización social, como sindicatos, partidos políticos o asociaciones religiosas, culturales, profesionales, etc.
En 2016, el INE publicó su Estrategia Nacional de Cultura Cívica 2017-2023, la cual incluía acciones específicas para promover la participación política de los jóvenes. A más de la mitad del camino de la implementación de dicha estrategia, el INE debería dar cuenta de los avances en la implementación de dicha estrategia y los logros alcanzados.
Si bien el Instituto Electoral tiene un papel crucial en la promoción de la participación política, no es la única autoridad con responsabilidad. Ante un contexto de escaso interés de los jóvenes en la política y su baja participación, deberán rendir cuentas también, entre otros, el gobierno federal, especialmente la Secretaría de Gobernación, y los gobiernos estatales y municipales.