El lunes 5 de octubre se dio a conocer la destitución del hasta entonces director del CIDE Región Centro, Alejandro Madrazo Lajous, por presuntas presiones de la directora del Conacyt Elena Álvarez-Buylla. Continuará trabajando, sin embargo, como investigador de la institución.
Mediante un tuit, Madrazo informó que fue destituido por “pérdida de confianza”. En agosto de 2021, se nombró al Dr. José Antonio Romero Tellaeche como director interino del Centro de Investigación y Docencia Económicas, una de las instituciones académicas más importantes del país. El nombramiento de Romero ocurre después de la renuncia del Dr. Sergio López Ayllón, y estará en el cargo hasta que designe a una nueva persona mediante el proceso correspondiente.
El día de hoy fui removido por “pérdida de confianza” de la Dirección de la @CIDE_RC
Haber dirigido a nuestra comunidad ha sido una responsabilidad de la que estoy orgulloso, pero más orgulloso estoy de pertenecer a mi comunidad, en la que continuaré como profesor-investigador.
— Alejandro Madrazo Lajous (@BuenMadrazo) October 6, 2021
El despido ocurre después de la publicación de un video en el que el Dr. Madrazo Lajous mostró su apoyo a los investigadores y las investigadoras que trabajan en el CIDE mediante el esquema del Programa Cátedras Conacyt. Desde hace algunas semanas, investigadores del Conacyt han manifestado en plataformas digitales que no cuentan con certeza laboral y que el Consejo les pide requisitos absurdos para conservar sus empleos. La protesta ha tomado notoriedad con el hashtag #BuscoTrabajo.
La destitución ha despertado protestas entre la comunidad académica, quienes han calificado la decisión como “censura a investigadores” y que las actividades académicas enfrentan un ambiente “hostil contra la pluralidad y la libertad de expresión”, como han expresado Javier Flores de la UNAM y Jorge Javier Romero Vadillo de la UAM.
Álvarez-Buylla: científica neoliberal de clóset
¿Por qué es importante?
El acoso del gobierno federal contra el pensamiento plural sigue avanzando. En las últimas semanas, la comunidad científica ha sido el principal objeto de sus ataques, con la persecución judicial de 31 científicos a los que se acusó de corrupción y delincuencia organizada y que ya han sido absueltos por un juez federal. Además del acoso de la Fiscalía General de la República, López Obrador ha aprovechado este caso para estigmatizar a la comunidad científica desde el púlpito presidencial. Ahora se destituye al director de un relevante centro de investigación.
Este hecho se suma al otro ataque a la democracia que ha atraído reflectores esta semana: López Obrador anunció que no asistiría a la entrega de la medalla Belisario Domínguez porque la senadora Lilly Téllez “convocó a que le faltaran al respeto”. La convocatoria a la falta de respeto en cuestión fue un tuit en el que Téllez escribió: “el violador serial de la Constitución… vendrá al senado la próxima semana; es preciso hacerle frente”. En consecuencia, AMLO rehuyó del diálogo y lanzó a los senadores de Morena y a sus seguidores en redes sociales a atacar a la autora del tuit.