China es considerado un país que potencialmente “piratea” cualquier producto, unos incluso, muy similares a los originales, desde ropa, artículos de moda, autos, electrodomésticos y de tecnología.

Pero parece ser que el avance científico les ha permitido abundar más en el tema de clonación de animales y en un futuro, hasta ser humanos, la moneda está en el aire.

Hace unos días circuló por algunos medios internacionales el caso de un hombre chino que decidió clonar a su gato “Garlic” porque lo extrañaba mucho.

 

La empresa Sinogene ofrece este tipo de asistencia a cualquier persona por la mínima cantidad de 35 mil dólares, es decir, 700 mil pesos mexicanos.

Dicha empresa asegura que el negocio de la clonación de mascotas será muy lucrativo en los próximos años, clonaciones que pasan por un permiso, más trámites requeridos por el gobierno chino, haciendo un total de 7 meses de espera para recibir la sorpresa de que puede volver abrazar a su mascota amada.

En Japón, por ejemplo hay un centro de clonación de perros que por 100 mil dólares, es decir, 2 millones de pesos mexicanos, se puede clonar a su perro aún estando vivo o con pocas horas de muerto.

Lo mismo ocurre en China o Corea que desde 2018 clonaron a un chango, y no podemos olvidar el caso de la oveja Dolly que clonaron los escoceses en 1996.

¿Quién te gustaría que fuera eterno?, es la pregunta que quizás muchas personas se harían y que desde hace algunos años está en boca del mundo.

Desde 2018 hay una gran polémica por el tema de la clonación, la comunidad científica, religiosa, política, las sociedad civil en muchos casos, consideran que es una amenaza para la humanidad.