Tras una crisis de representación y confianza que hay en los jóvenes hacia los partidos políticos, urge un cambio de liderazgo y clase política, demandó José Ricardo Espinosa, analista político.

Hace unas semanas, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) anunció que estaba inmerso en un proceso de transformación, el cual consistía en nueva corriente, cuyo objetivo era una total renovación y evitar que Morena se ratifique en la presidencia para 2024. 

Sin embargo, este grupo denominado Plataforma para la Refundación del PRI, está integrado por “varios huesos viejos” del tricolor como Margarita Sánchez Gavito, Jaime del Río, Jarmila Olmedo, José Encarnación Alfaro y Fernando Lerdo de Tejada.

Nuevas corrientes, mismos mares

Para el experto, esas “nuevas corrientes”, no son más que grupos internos, que siempre han estado presentes y no tienen la fuerza suficiente para generar un cambio o atraer nueva militancia.

Sobre todo, entre la juventud que cada vez está menos interesada en las propuestas del PRI, incluso las considera arcaicas. “Esto pasa por las formas de actuar y comportarse no reivindican el valor de la participación libre, no propician la libre expresión, abundó el entrevistado, todo eso les cierra la puerta a las nuevas generaciones”.

“Al PRI se le ve envejecido por sus prácticas políticas, está muy desgastado por ser por muchos años el apéndice del presidente, y pasa por una de sus peores crisis, no ha logrado tener esa frescura ideológica que necesita para un cambio”, expuso Espinoza.

Cabe destacar que el PRI cuenta con La Red Jóvenes, que sirve como espacio de formación y capacitación política de la juventud,  y hasta la fecha cuenta con 500 mil afiliados a nivel nacional.

Recordó que estos grupos internos tienden a actuar en su propio beneficio, es decir, que si logran transformar algo será para sus propios intereses, “muchas es para encabezar el partido y así tener más poder”.

Aunque el PRI construye un discurso señalando que los jóvenes son su fuerza, eso solo queda en posts y espectaculares pero no está acompañado de verdaderas prácticas, y lo único que provoca es una gran decepción.

Jóvenes ya no creen en los políticos 

Un estudio realizado por la Universidad Nacional Autónoma de México arrojó que para el 90 por ciento de los jóvenes, los políticos en México son deshonestos; y nueve de cada 10 no sienten que su opinión sea considerada por el gobierno a la hora de tomar decisiones.

Sobre este punto el experto, destacó que los jóvenes “no se quedan callados y de brazos cruzados, ellos reclaman, exigen y proponen” y como muchos ciudadanos, desean que los actuales partidos promuevan una mayor cultura democrática y nuevas prácticas.

En este sentido, durante el sexenio de Peña Nieto, algunos priistas se pronunciaron en contra de la iniciativa presidencial de legalizar los matrimonios igualitarios.

PRI pierde militantes pero intenta tiktoks 

Datos de la página oficial del partido señalan que en junio de 2019 el PRI tenía seis millones 764 mil 615 afiliados; sin embargo, para julio del año pasado había sólo un millón 398 mil 536, es decir que tuvo una baja de cinco millones 366 mil 79, el 79 por ciento en sólo 24 meses.

Lejos del poderío político que tuvo durante 70 años, actualmente gobierna a 21.7% de la población, cuando en 2016 gobernó al 54 por ciento.

Al respecto, Espinosa recordó que “el PRI es un partido que ha perdido mucha presencia política en los últimos años, por eso ha optado por tratar de mantener su presencia aliándose con el PAN y ser una especie de remolque, pero ni eso le ha servido para no perder militantes”.

En TikTok, plataforma con uso intenso por los millennials, la cuenta oficial del PRI registra 1,536 seguidores y no reniega de su pasado al mostrar a PRIREX como su identidad. Pero ni Morena, Acción Nacional o PRD registran alguna cuenta en dicha red social.

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Cada derrota electoral del PRI ha sido más grave que la anterior. El pasado 6 de junio tuvo la más evidente al perder ocho gubernaturas, entre ellas Colima y Campeche, donde siempre había gobernado. Para la Cámara de Diputados consiguió solo 11 distritos de mayoría y 65 en alianza con PAN y PRD.