En redes sociales, la palabra mágica del momento es: dupe. ¿Qué es? Un producto más barato, pero casi igual al original. Desde perfumes y maquillaje hasta ropa, gadgets o apps… los dupes se han vuelto el nuevo objeto de deseo. Pero, ¿qué hay detrás de esta tendencia?
TikTok y la cultura del “casi lo mismo”
Las beauty bloggers y creadores de contenido aman mostrar “el clon barato” de un producto viral. ¿No quieres pagar $2000 por una crema? Aquí tienes su dupe por $199. Esta cultura ha crecido tanto que hay cuentas dedicadas solo a encontrar imitaciones.
El marketing de la comparación
Ahora las marcas ya no solo venden un producto, venden comparaciones. Algunas incluso se promocionan como “la versión accesible de tal marca”, y eso se ha vuelto parte de su identidad. Es marketing sin vergüenza, y funciona.
Psicología del dupe
En una era de inflación, crisis y exceso de oferta, los dupes representan algo más que ahorro: representan ser más listo que el sistema. La gente quiere sentirse inteligente al comprar, y encontrar un dupe se siente como ganarle al capitalismo… aunque sigas comprando.
¿Moda o problema?
La popularidad de los dupes también ha generado críticas: ¿estamos premiando la copia en vez de la innovación? ¿Qué pasa con la calidad, la ética de producción o el respeto a marcas pequeñas? No todos los dupes son inofensivos: algunos rozan la piratería y pueden poner en riesgo la seguridad del consumidor.
¿Qué nos dice esto del marketing hoy?
Que la gente ya no solo busca lujo o marca: busca valor, autenticidad y opciones reales. El marketing digital actual gira más en torno a la comparación, la comunidad y la experiencia del usuario, que a la fama de una etiqueta. El consumidor joven quiere decidir con datos, con pruebas y con reviews reales.
Por : Andy I.
