Una de las mayores pesadillas de cualquier persona es entender el lenguaje de los abogados. Su exceso en el uso de términos complicados y frases rebuscadas nos deja siempre confundidos cuando vamos por una orientación para resolver un problema. La cosa se pone peor cuando tenemos que acudir ante la justicia, pues los jueces no se salvan de estas prácticas. Pareciera que estamos destinados a contar con un diccionario especializado, para saber si ganamos o perdimos un caso.

 

Con estas complicaciones, no es posible cumplir la máxima de que la justicia sea para todos. Afortunadamente, el Poder Judicial de la Federación ya está en el tema.

 

En octubre de 2013, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación emitió, por primera vez en nuestro país, una sentencia en formato de lectura fácil, con el fin de que una persona con síndrome de Asperger la pudiera comprender, atendiendo las dificultades que presentan para comprender los sentimientos y el lenguaje no verbal.

 

Ricardo Adair Coronel Robles tenía 15 años biológicamente ,pero contaba con la madurez y comprensión de un niño de 6 años según dictámenes clínicos, por lo anterior  un juez determinó que estaba incapacitado para valerse por sí mismo y nombró a su mamá como tutora y a su papá como cuidador.

 

Los padres le informaron a Ricardo el veredicto del juez y él, inconforme, decidió apelar la resolución, al considerar que, aunque se encuentra en una situación de discapacidad, ello no es suficiente para negarle la posibilidad de tomar sus propias decisiones, es decir, estaban atentando contra su capacidad de ejercicio.

 

La Suprema Corte confirmó este criterio y por ende determinó la emisión de una sentencia en formato de lectura fácil, para cumplir la convención internacional de brindar información y documentación adecuada a las personas con discapacidad. La sentencia no incluía tecnicismos y la redacción era simple y directa.

La Sentencia

1. Al analizar tu caso la Corte decidió que tú, Ricardo Adair, tienes razón.

2. En poco tiempo un juez te llamará para pedirte tu opinión sobre tu discapacidad.

3. El juez platicará varias veces contigo sobre qué actividades te gusta hacer, qué es lo que no te gusta hacer, cuáles son tus pasatiempos y cosas así.

4. Cuando platiques con el juez, te va a explicar por qué te llamó y hablará contigo de forma amigable.

5. Si tú así lo quieres, un familiar tuyo o algún amigo te puede acompañar cuando vayas con el juez.

6. Además, el juez platicará de tu caso con tus papás, con médicos y con otras personas como maestros y abogados.

7. Después de que el juez platique con todos ustedes, decidirá qué cosas puedes hacer solo y en qué cosas vas a necesitar que alguien te ayude.

8. En todas las decisiones que se tomen sobre ti, tendrán que preguntarte qué es lo que opinas. Tu opinión será lo más importante cuando decidan cosas sobre ti mismo.

9. El juez decidirá qué personas, como alguno de tus familiares, te ayudarán cuando vayas a tomar una decisión sobre ti mismo o tus pertenencias.

10. Cuando tú consideres que algunas de las cosas que dijo el juez que tenías que hacer con ayuda, ahora las puedes hacer tú sólo, puedes ir con el juez y decírselo.

 

Lectura fácil también para niños

 

Desde entonces, el Poder Judicial ha ido incorporando estos textos sencillos a la sentencia tradicional, primero, cuando intervienen personas con discapacidad y, más recientemente, niñas y niños.

 

Hace unas semanas, el juez de distrito Israel Flores Rodríguez otorgó un amparo que obligaba a las autoridades de salud de Puebla, otorgar medicamentos oncológicos a una niña con leucemia.

 

Algunos párrafos de la conmovedora sentencia:

Esos doctores y doctoras me dijeron que sí tienen el medicamento que tu mamá les pide, sólo que esta semana no te lo podrán dar porque primero deben darte otra medicina, y ya después valorarán cómo seguirá tu tratamiento.

 

 

Debes estar muy contenta porque tu mamá te cuida y se preocupa mucho por ti, y espero que, con su participación, la del personal médico y la mía, podamos conseguir que no te haga falta nada para que cada vez te sientas mucho mejor y tu salud se restablezca día con día.

 

Siguiente parada: leguaje sencillo para todos

 

La Suprema Corte considera que este formato de sentencia sencilla también se use cuando se involucre a personas migrantes, comunidades y pueblos indígenas y en general todos aquellos casos que sea necesario por las características y condiciones sociales de las partes o en casos de importancia y trascendencia social.

 

Sin embargo, el movimiento para promover el lenguaje sencillo no es nuevo. Países como Estados Unidos y Canadá cuentan con leyes para promover el uso de un lenguaje claro. Y, recientemente, la ciudad de Buenos Aires aprobó la Ley de Lenguaje Claro, que obliga a todos los poderes y órganos del estado. Acá, el senador Miguel Ángel Mancera presentó una iniciativa sobre tema, para poner la obligación del lenguaje sencillo en las sentencias, desde la Ley de Amparo, la cual se encuentra en estudio.

 

El Ministro Presidente Arturo Zaldívar reconoce que no es fácil entender el lenguaje de los jueces y que es necesaria capacitación y sensibilización a los juzgadores para construir argumentos sólidos y bien fundamentados, pero explicándolos de manera clara y sencilla para el resto de las personas.

 

Con la nueva reforma judicial, es indispensable que el ministro cumpla su palabra.