En el ecosistema vertiginoso de las redes sociales, la Generación Z se ha consolidado como uno de los públicos más influyentes y exigentes. Entenderlos no es una opción para las marcas: es una necesidad. Crear contenido sin estudiar a fondo a esta generación es como lanzar una flecha con los ojos vendados. Puede parecer que estás haciendo algo, pero no estás llegando a ninguna parte.

¿Quiénes son realmente los Gen Z?

La Generación Z está conformada por personas nacidas aproximadamente entre 1997 y 2012. Son nativos digitales, crecieron con internet, redes sociales y smartphones. Esto les ha dado habilidades únicas para filtrar contenido: su atención es breve, pero su capacidad de análisis es aguda. En solo segundos pueden decidir si algo les interesa o no. Pero lo más importante: valoran la autenticidad, la diversidad, la inclusión y el impacto social.

Contenido que conecta, no que decora

Una marca que se dirige a la Gen Z no puede limitarse a “verse bien”. Este público quiere más que estética: busca contenido con propósito, con historia y con valores. El storytelling, los mensajes transparentes y los creadores reales (no necesariamente influencers con millones de seguidores) tienen más impacto que una producción costosa sin alma. Si no les hablas con honestidad, no te escuchan.

Rapidez, interacción y formatos nativos

Los Gen Z prefieren formatos ágiles: videos cortos, imágenes dinámicas, reels, TikToks. Además, quieren participar: dejar un comentario, responder una encuesta, sentirse parte de la conversación. Las marcas que no generan interacción, pierden relevancia. Estudiar estos comportamientos ayuda a diseñar contenido que no solo es visto, sino compartido y comentado.

Causas sociales: no es moda, es identidad

Una de las características más marcadas de esta generación es su vínculo con causas sociales. Apoyan marcas que se pronuncian, que son coherentes y que actúan. El greenwashing o los discursos vacíos son rápidamente señalados. Entender esto es crucial al construir una estrategia de contenido: si lo que publicas no refleja valores genuinos, la Gen Z lo notará… y te lo hará saber.

Estudiar a tu target, especialmente si es Gen Z, es un paso obligatorio para cualquier estrategia de contenido. No se trata solo de saber su edad o qué apps usan, sino de comprender su lenguaje, sus valores y lo que realmente les mueve. Solo así lograrás crear contenido que no pase desapercibido, que conecte y que construya relaciones reales con una generación que no se conforma con menos.

¿Y tú, qué opinas?

Karina González