Tener trabajo y hacer lo que a uno le gusta es sin duda una de las satisfacciones que pocas personas disfrutan, sin embargo, el tiempo para llevar a cabo nuestras labores profesionales tiene que ser medido ya que un nuevo estudio conjunto de la Organización Mundial de la Salud y La Organización Internacional del Trabajo, advierte que trabajar más de 55 horas a la semana es peligroso para la salud, incluso aumenta el riesgo de muerte.

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La doctora María Neira, directora de Medio Ambiente, Cambio Climático de la Organización Mundial de la Salud, hace un llamado para que gobiernos y empleadores tomen conciencia de las largas horas que tienen sus trabajadores.
El estudio concluye que trabajar 55 horas o más a la semana se asocia con un aumento del 35 por ciento del riesgo de un accidente cerebrovascular y del 17 por ciento de morir de una cardiopatía isquémica, comparado con una persona que trabaja entre 35 a 40 horas semanales.
Asimismo, los efectos negativos aparecen a los 10 años de llevar esta vida laboral de horas prolongadas de trabajo.
Las regiones del Pacífico Occidental y sudeste asiático es donde trabajadores informales se ven obligados a llevar jornadas extenuantes, pero también en Latinoamérica se presenta este tipo de problema en trabajadores irregulares, que deriva en afectaciones a la salud.
La Organización Mundial de la Salud y la Organización Mundial del Trabajo, calculan que uno de cada 10 trabajadores en el mundo, es decir alrededor de 480 millones de personas, trabajan más de 55 horas a la semana.