La experiencia de comprar con un clic

Comprar en línea ya no es novedad, sino parte de la rutina. Desde ropa hasta comida, todo está a un toque de distancia. La comodidad es el punto más fuerte: no hay filas, no hay horarios y puedes comparar precios en segundos. Además, la emoción de esperar un paquete en casa se ha convertido en un ritual moderno.

Ir de compras como plan social

Por otro lado, las tiendas físicas todavía tienen un encanto especial. Probarse ropa, ver productos en vivo y vivir la experiencia con amigos es algo que internet no puede igualar. Para muchos jóvenes, ir de shopping no es solo una necesidad, sino un plan para convivir.

¿Confianza o desconfianza?

Aunque el e-commerce crece, algunos todavía sienten cierta inseguridad: ¿y si no llega?, ¿y si no es como en la foto? En cambio, en la tienda física ves, tocas y te llevas lo que quieres al instante. La confianza sigue siendo un factor decisivo.

¿El futuro es híbrido?

Más que una competencia, parece que ambas formas de comprar se están mezclando. Muchas marcas ofrecen experiencias híbridas: compras online con recolección en tienda, probadores virtuales o descuentos exclusivos en apps. La tendencia apunta a que los jóvenes tendrán lo mejor de los dos mundos.

Por : Andy I.